Una nueva oportunidad para mamá: la historia de Rocío
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Una nueva oportunidad para mamá: la historia de Rocío
Hace unos meses, entrevisté a Rocío durante un proceso de selección y contratación. Lo que comenzó como una conversación laboral terminó convirtiéndose en un momento de conexión genuina. Más allá de los datos relevantes para la vacante, Rocío me compartió una historia de esfuerzo, valentía y perseverancia que me dejó profundamente inspirada.
Al preguntarle un poco sobre su vida personal, Rocío hizo una breve pausa. Intentó enfocarse en datos profesionales, pero pronto me confió que es madre soltera de tres hijos. Durante su juventud, logró obtener un título universitario y desarrollarse profesionalmente. Fue en ese entorno donde conoció a su exesposo, con quien compartió varios años de vida y formó una familia.
Cuando quedó embarazada, tuvo claro que quería dedicarse por completo a la maternidad. Ser mamá a tiempo completo, como muchos sabemos, conlleva una carga mental importante y un desgaste físico considerable. Sin embargo, hace algunos meses, tomó una de las decisiones más valientes de su vida: separarse de su esposo ante una situación de malos tratos y empezar de nuevo.
Decidida a reinsertarse en el mundo laboral, Rocío comenzó a buscar empleo. Meses después, aún no había conseguido una oportunidad. Aunque participaba en entrevistas y enviaba su currículum constantemente, no lograba avanzar en los procesos, lo que poco a poco fue minando su motivación.
Durante nuestra charla, le comentó que sin duda tenía las habilidades necesarias. Tal vez necesitaba actualizar algunos conocimientos, producto de los años fuera del ámbito laboral, pero su historia hablaba de alguien resiliente, comprometido y capaz. Todos merecemos una nueva oportunidad para crecer y redescubrir nuestro potencial.
Después de varias conversaciones con el cliente, donde destaqué las fortalezas de Rocío y los beneficios de apostar por su perfil, finalmente logramos ese “final feliz”: Rocío fue contratada. Hoy ha superado con éxito su período de prueba y el cliente está plenamente satisfecho con su desempeño.
La historia de Rocío no es única. Refleja la realidad de muchas mujeres que, tras poner en pausa sus carreras por la maternidad, sueñan con retomar el rumbo profesional. Por eso, mi consejo para quienes están en esa situación es: mantengan su expediente en orden, con constancias laborales bien archivadas; aprovechen los diplomados virtuales para actualizarse; y sobre todo, no pierdan la actitud y la confianza. Sorprendería saber cuántas personas quedan descartadas desde el primer contacto por transmitir una mala disposición. La clave está en demostrar que eres un valor agregado para cualquier empresa y que estás dispuesto a aprender lo que haga falta.
Como organizaciones, también tenemos una gran responsabilidad. Debemos crear procesos más flexibles e inclusivos, que permitan a las mamás —ya cualquier persona en transición— tener una oportunidad real de volver al mundo laboral. Porque detrás de cada currículum hay una historia, y muchas veces, esas historias son las que hacen la diferencia.
