Hay un dicho fuertísimo que dice: “Primero hay que ser y luego parecer”, en consecuencia, si deseas impactar en tu laburo o destacar en tu emprendimiento hablaremos de 5 áreas en las que tendremos que trabajar.

La Imagen es perfección, de hecho, con tu imagen puedes decir mucho aún sin pronunciar una sola palabra. La primera impresión que causas cuando te presentas a una entrevista, a tu trabajo o cuando llegas a presentar tu proyecto, suma o resta para alcanzar tus objetivos.

La imagen no es un tema frívolo, todo lo contrario, es una herramienta que deberíamos usar de la manera más apropiada para lograr nuestras metas y objetivos personales.

Ahora, creo que tener buena imagen influye en el estado de ánimo y es un hábito que debemos cultivar siempre. No solo para que otros disfruten de una buena imagen nuestra, sino como una forma de gratificarnos a nosotras mismas y, ¿porque no?, influir en nuestra familia.

El famoso escritor Oscar Wilde dijo: “Nunca hay una segunda oportunidad para causar una primera buena impresión” y por ello quienes deseamos hacer las cosas con excelencia, debemos ser intencionales y mucho mas con nuestra imagen.

Cuando nos presentamos a una entrevista, a nuestro primer día de trabajo o cuando asistimos a una reunión representando a nuestra marca, lo que perciben de nosotras es lo siguiente:

• 55% es nuestra imagen visual. Compuesta por nuestro atuendo y apariencia. Incluye cómo caminamos, si vamos vestidos de acuerdo con lo que representamos.

Por ejemplo, una ejecutiva bancaria que representa a su empresa nunca debería presentarse en jeans y tenis. Por otro lado, una persona creativa (como diseñadores y estilistas) deberían portar atuendos con los que reflejen su lado innovador.

• 38% es nuestro comportamiento. Es cómo caminamos, cómo nos sentamos, si saludamos al llegar, qué tan enérgicos o tímidos nos presentamos, etc.
• 7% Lo que decimos. El mensaje en sí.

Nuestra imagen debe hablar de la esencia, de nuestra identidad, del estilo personal que hemos desarrollado o que debemos construir. Mi imagen dice quién soy con tan solo una mirada, qué gustos tenemos y cómo nos sentimos en ese momento.

Para construir una buena imagen personal debemos tener en cuenta las siguientes áreas:

1. Conocer qué es lo que deseo comunicar con mi imagen. Imagen profesional, de éxito o relax total (definir mi objetivo).
2. Conocer y aceptar nuestro cuerpo y qué parte me gustaría potenciar. Es importante conocer que hay prendas que nos queda bien, pero hay alguna que si nos favorece y va acorde a nuestro tipo de cuerpo.
3. Trabajar en mi estilo personal de acuerdo a mis objetivos o perfeccionar el que ya tengo. Estilo casual, elegante, ejecutivo, creativo, etc.
4. Conocer cuales colores nos potencian. Colores que nos hacen brillar y destacar ya que cada color trasmite algo a nivel psicológico.
5. Saber ser y saber estar, es básico. Los buenos modales, el lenguaje apropiado y sobre todo la seguridad en nosotras misma con la mejor actitud.

La imagen personal es nuestra carta de presentación. ¿Que está diciendo de nosotras esta carta de presentación que estamos exponiendo?

Este es un año nuevo de oportunidades por lo que les invito a trabajar en estas áreas.

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Carmen Portillo

Asesor & Coach de Imagen

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