Por Erivan Campos Conde

Científicamente hablando se diría así: “La abuela materna llevó en su útero el ovocito de su nieto”. Que traducido al castellano llano sería: “todos estuvimos dentro del vientre de mamá y a la vez, en el vientre de la abuelita”.

Suena a ciencia ficción, pero es totalmente cierto. ¡Imagínate desde cuándo estás, físicamente ya en esta tierra! Y más fuerte aún imagínate todo lo que esto debe significar.

Por este y mil motivos más la abuela materna es tan importante en la vida de todos. Casi nos marca el pasado y el futuro a la vez. Esa conexión creada desde antes de nacer no puede ser ignorada y quizá nos ayude a comprendernos y a sanar.

Este milagroso tema podemos analizarlo desde lo tangible y material y desde lo intangible, inmaterial y sentimental, así que, ahí vamos:

Te lo explico desde el alma:

Ya Alejandro Jodorowsky, lo explica de una espectacular manera: “La abuela materna es la clave a la hora del traspaso de información genética y de programas. Resulta que cuando ella estaba embarazada, el feto ya tiene los ovocitos formados. Uno de estos óvulos, llevará el nombre de su nieto/a. Así que ese óvulo lleva la información de la abuela”.

Como premisa debes saber que las bebés ya nacen con la cantidad total de óvulos de toda su vida.

Entonces, en los óvulos que se formaron en tu mami, mientras estaba en el vientre de tu abuelita, ¡ya estabas tú y tus hermanos!

Papá solo decidió si serías niño o niña, toda la carga genética la colocan mamá y la abuela. ¿No suena esto a fantasía pura?

Todo lo que la abuela sintió durante su embarazo, lo que vivió esos nueve meses, sus alegrías, miedos y tristezas… todo, todo, todo, queda como información grabada en cada célula de su bebé y en los óvulos de su bebé.

Si la abuela estuvo feliz, ya traes arado el camino, ya hay información en ti sobre la felicidad, ahora si ocurrió todo lo contrario, deberemos sanar en algún punto de nuestra vida, las heridas emocionales de la abuela y las nuestras propias.

Te lo explico desde la ciencia:

Los óvulos comienzan a formarse a partir de las nueve semanas de gestación. Alrededor del quinto mes de embarazo la bebé en el vientre de su madre, tiene alrededor de siete millones de ovocitos (óvulos inmaduros, es decir sus futuros bebés).

Una célula tuya (óvulo) con toda tu carga genética estuvo en tu mami cuando ésta era un feto, en el vientre de tu abuela.

Aunque haya distancias, aunque no la veas con frecuencia, incluso si no la conoces, la abuela materna es parte fundamental de tu historia.

Sin embargo, la herencia no lo es todo, cada quien tiene las riendas de su propio destino y podemos cambiar nuestra historia. Abuela y madre definen de dónde venimos, tú y solo tú decides a dónde vas, qué sueñas y cómo lo lograrás.

Agradece por todo lo que vienes cargando por las millones de historias que han vivido tu abuelita y tu madre, por todo eso que ya viviste estando dentro de ellas. Ahora, analiza lo malo y cámbialo, crea tu presente y diseña tu futuro.

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Erivan Campos Conde

Comunicadora Social. Periodista.

Intérprete de Lengua de Señas

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