Por: Patricia Schaeffer

Gracias a nuestro creador por ser mujeres, somos símbolo de amor, paz de trabajo y sin duda, si sigo nombrando más virtudes, no acabaría. Lastimosamente hay luces que apagan a otras y es triste ver cómo luces se van acabando por cansancio, maltrato, el no saber qué hacer, falta de trabajo, el recorrer el mundo sin horizonte alguno. 

Esa luz con problemas diarios en donde solamente buscamos un apoyo y no un apagón de otra luz, seamos esas mujeres que hoy en día somos Luz radiantes en donde tengamos amigas, conocidas, familia, o incluso solo con verla, tengamos el don de irradiar la luz del prójimo especialmente a las que más lo necesitan siempre. 

Hay personas con menos problemas, algunas tienen menos cosas, otras más o menos recursos, pero siempre es una cadena y quizá podemos o no ayudar en lo material, pero ayudar a que sea exitosa a valorar sus virtudes, hacer que se vea en ese espejo maravilloso y que diga, soy luz e irradiaré siempre y ayudaré a alguien más.

En esta época existe mucho el ver quien gana, el ver quien tiene más, quien es el mejor, sé que juntas lucharemos con nuestra luz para que esto termine, para que exista nuevamente la ayuda al prójimo, la ayuda a esa persona que lo necesita, espacialmente a esas mujeres que día a día luchan por ser mejores, luchan por esa familia, por ser mejor profesional, por tener el mejor empleo, por llevar el pan de cada día, por las que apoyan a las demás sin esperar nada a cambio. 

Eso sin esperar una luz más grande para que cada día sean de bendición para seguir apoyando, no hay excusa alguna de decir no puedo o no tengo, en esta vida todos tenemos algo que será de gran ayuda para alguien más. La mujer hoy en día es y será luz por siempre… 

Apoyemos y brillemos juntas.

Por: Patricia Schaeffer

Empresaria e Ingeniera

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