Se acerca el fin de año: Lo lograste

Este año ha sido una montaña rusa, ¿verdad? Ahora que el fin de año está a la vuelta de la esquina, es inevitable mirar hacia atrás y preguntarnos: ¿Cómo llegué hasta aquí?.

Entre días buenos y no tan buenos, en los que quizás todo parecía desmoronarse, aquí estás. Tal vez no con todas las respuestas, tal vez aún con algunos miedos, pero definitivamente más fuerte, más sabia y más consciente de lo que realmente importa. Es como si el calendario nos diera permiso para parar y reflexionar: ¿qué logré? ¿de qué me salvé?.

Porque este año no fue fácil para nadie. Todos enfrentamos nuestras propias batallas: algunas visibles, otras profundamente personales. Quizás te enfrentaste a cambios inesperados en el trabajo, en tu familia o incluso en ti misma. A lo mejor tus planes no salieron como esperabas. Pero quiero que te detengas por un momento y te des cuenta de algo importante: pudiste contra todo.

Sí, tal vez hubo días en los que sentiste que no podías más. Esos momentos de duda, de incertidumbre, cuando la vida parece girar fuera de control. Pero aun así, seguiste adelante. No siempre perfecta, no siempre con la energía que hubieras querido, pero persististe.

Y aquí está el truco: el fin de año no tiene que ser un recordatorio de lo que no lograste o de lo que pudo haber sido diferente. Más bien, es una oportunidad para reconocer todo lo que sí superaste. Cada obstáculo que te desafió, cada miedo que enfrentaste, cada vez que te levantaste cuando parecía más fácil rendirse.

Al final, el balance no es cuántos éxitos acumulas en tu lista, sino cuántas veces decidiste seguir adelante, aun cuando las circunstancias no eran ideales.

Así que, mientras diciembre se acerca y las luces empiezan a brillar por todos lados, date una palmadita en la espalda. Porque sí, pudiste contra todo. Lo lograste. Puede que no de la forma que imaginabas, pero lo hiciste, y eso es digno de celebrar.

Y ahora, con el año nuevo en el horizonte, recuerda: no se trata de ser perfecta, se trata de ser valiente, de aprender y de seguir adelante. Después de todo, si pudiste con este año, ¿qué no podrás hacer el próximo?