"La contaminación no solo enferma tus pulmones… también puede silenciar tu capacidad de dar vida."

Nuevas investigaciones advierten sobre el impacto alarmante de la contaminación del aire en la salud reproductiva femenina. Más allá de los problemas respiratorios, la exposición prolongada a partículas tóxicas se asocia con desequilibrios hormonales, disfunción ovárica, infertilidad y síndrome de ovario poliquístico.

El aire contaminado altera procesos clave en el organismo: desde la ovulación hasta la calidad del endometrio. Esto significa que incluso mujeres jóvenes y saludables pueden ver afectada su capacidad de concebir o de llevar un embarazo a término.

Este riesgo, aunque respaldado por evidencia científica, rara vez es prioridad en políticas de salud pública. La mayoría de las campañas medioambientales se enfocan en el cambio climático o en enfermedades respiratorias, dejando de lado el impacto reproductivo.

Para las mujeres, esta es una amenaza silenciosa pero constante. No solo afecta sus planes de maternidad, sino también su equilibrio hormonal general, lo que influye en el estado de ánimo, el metabolismo y la salud ósea.

En un mundo donde cada vez es más difícil controlar la calidad del aire, estas conclusiones deberían impulsar cambios legislativos, sistemas de monitoreo ambiental más estrictos y estrategias de prevención desde la infancia.