De Bajón, Tristeza, Depresión o Distimia.

Cuantas de nosotras hemos escuchado a alguien decir que está “Depre”, o incluso hemos usado erróneamente nosotros este término, para describir que nos sentimos de bajón o desganadas.

En este artículo aprenderás a diferenciar y detectar síntomas, para que puedas buscar la ayuda de un profesional si fuera necesario.  Los desganos, pueden estar ocasionados porque nuestro sueño nocturno no está siendo reparador, puede que una mala alimentación nos esté generando esta sensación, el sedentarismo es otro factor que puede afectar, e incluso el nivel de nuestros glóbulos rojos puede que no nos esté brindando esa energía necesaria para tener un día productivo y provechoso.  Si este fuera tu caso, el buscar ayuda de una nutricionista, cambiar los hábitos de sueño, ejercicio y alimentación, e incluso un chequeo con un médico general, pueden ser de gran utilidad.

La tristeza, es una emoción natural pasajera, generada por la frustración de un deseo que es imposible de cumplir. La tristeza nos da la sensación de aflicción, desánimo o desilusión. Está bien que cuando sintamos tristeza, queramos aislarnos por un tiempo para tomar aire y pensar. También podemos hacer una pausa para meditar, orar, recordar, llorar, consentirnos, etc. Sin embargo, la función de la tristeza es que las personas podamos recibir afecto de otras personas y si nos alejamos demasiado, no estaremos dándonos esa oportunidad.  Recuerda que las emociones no son buenas ni malas, las emociones sólo tenemos que aprender a gestionarlas, el buscar de Dios, el ser vulnerable y el rodearte de personas que te aman es una excelente manera de acompañar tu tristeza y sanar tu dolor.

Las alarmas que te pueden alertar para que puedas considerar una tristeza como algo que sea preocupante, es la duración y profundidad de la misma.  La depresión es un trastorno del estado de ánimo que no necesariamente se genera por un acontecimiento desencadenante. Cuando existe depresión, la persona ha vivido más de 6 meses una incapacidad de enfrentar cualquier situación cotidiana, habla en mucha negatividad en todas las áreas de su vida, inclusive puede tener ideas suicidas.  Siente angustia, inutilidad, desesperanza, apatía, culpa, falta de iniciativa y le cuesta tomar decisiones. La depresión puede ser leve, moderada y grave. Las causas de la depresión pueden ser:

a. Reactiva, es ocasionada por algo que se vivió y puede ser tratada en terapia.

b. Endógena, ocasionada por cambios hormonales o heredado, es tratada con medicamentos recetados por un profesional, no con terapia.

c. Orgánica, debido a una lesión cerebral, infartos, convulsiones y fármacos, es tratada con terapia y también con medicamentos recetados por el profesional.  La depresión no es un signo de debilidad, sino el haber querido ser fuerte por largo tiempo, por eso la importancia de buscar la ayuda de un profesional.

Por último, hablemos sobre la distimia. La distimia, es una depresión no tan intensa, su tristeza y desesperanza no es extrema, pero lo malo es que dura mucho tiempo. Una persona que padece distimia, puede tener una tristeza constante de alrededor de 2 años, su apetito decae, no duermen bien, no desean socializar, hay una pérdida de interés en las actividades normales, baja autoestima, falta de concentración, falta de energía, tienen deseo de morirse, pero a la vez van al médico para cuidarse su salud. La distimia, es un trastorno del estado de ánimo y debe ser tratado en terapia y dependiendo el grado, con medicamentos recetados por un profesional.

Ahora que ya conocemos los términos y sus síntomas tenemos más claro como detectarlos. Recuerda que la vida es para disfrutar y vivirla bien, no esta mal el buscar ayuda cuando sea necesario. Al que pida se le dará, el que busca encontrará y el que llora será consolado.

Hasta una próxima.!

Por: Wendy Figueroa
Licda. En Admón. de RRHH
Orientadora Familiar
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