¿Recuerdas a tu abuelita en la sala por las tardes tejiendo y destejiendo? Concentrada en cada lazada que daba, orgullosa de cada proyecto que terminaba, luciendo ante toda la familia sus hermosos tejidos, que al verlos culminados todos se asombraban que esas maravillosas artes fueran hechas a mano.

Hoy te quiero contar un poco sobre el arte del tejido, como algunas de ustedes sabrán soy tejedora, tengo 7 años en el comercio con mi pequeño negocio de crochet y por otro lado doy cursos en los cuales he trabajado con mas de 100 mujeres a las que les he enseñado este maravilloso arte, pero no solo eso, les he enseñado a utilizar el tejido como herramienta para liberar, desprenderse, relajarse y elevar su autoestima.

Y se preguntarán ¿cómo es posible? Cuando nosotras tejemos entramos en una concentración mental parecida a la del Yoga, imagínate que al tejido le dicen el nuevo yoga, pues así es, tu mente empieza a liberarse de los pensamientos negativos que están rodeándote en ese momento, ya que está demasiada ocupada contando y recordando patrones que no tiene tiempo para boberías. Así de fantástico es como vas quitándote el estrés, empiezas a relajarte, bien dicen por ahí que “mente ocupada no tiene tiempo para las preocupaciones”.

Tejer da Felicidad

El centro de recompensas en tu cerebro libera un neurotransmisor llamado dopamina cuando haces algo agradable. Los científicos creen que la dopamina originalmente estaba diseñada para hacernos repetir actividades que ayudarían a la sobrevivencia de la especie, como comer y tener sexo. Con el tiempo, hemos evolucionado de tal manera que el cerebro también libera dopamina mientras pintamos vidrio o decoramos un pastel.

La dopamina, en sí, es nuestro antidepresivo natural. En cualquier momento podemos encontrar una forma que no involucre medicinas para estimular el centro de recompensas… mientras más lo hacemos, mejor vamos a estar.

Hay evidencia de una encuesta que respalda el efecto de la dopamina al hacer manualidades. En un estudio realizado con más de 3.500 tejedores, publicado en The British Journal of Occupational Therapy, el 81% de los encuestados respondieron que se sentían más felices después de tejer. Más de la mitad informó que se sentían «muy felices».

Otra de las maravillas de tejer es lo creativa que te vuelves, empiezas a imaginar y a crear, mezclas colores, puntadas y diferentes tejidos, hacer tus propias obras te lleva a elevar tu autoestima. Cuando inicias, es algo complicado poner tus manos en coordinación con tu aguja y lana,  incluso dudas si lo lograrás; al pasar los días y practicar se vuelve menos complicado, las manos se mueven por sí solas y al terminar tu primer proyecto te sientes tan orgullosa de ti misma que se eleva tu autoestima y te das cuenta lo capaz que eres de lograr lo que te propongas y esto pasa con cada proyecto nuevo.

Así es mis queridas amigas, tejer nos ayuda a estar en contacto con nosotras mismas por medio de lana y aguja, te invito a que te involucres al tejido o alguna otra actividad manual que te ayude a liberar tu mente y a ser más feliz.

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Elsa Gándara Madrigal
Diseñadora Gráfica con certificación en comercio digital
Fundadora de Little Apple Tejidos
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