Desde joven siempre me ha gustado escribir aunque no sea escritor. He escrito tres libros y he publicado uno. Admiro a todas las personas que escriben puesto la secuencia de las letras con las pausas regulares, enriquecen cualquier cosa que nos están diciendo o contando. En las últimas semanas en las notas que subo, me he topado con comentarios que no tienen lugar ni aqui ni en ningún lado, puedo entender la frustración, depresión y quizás hasta insatisfacción por no tener espacios donde puedan poner sus ideas, ya que en su salud mental lo bueno no existe, si no solamente el ataque directo y con sentimientos tan negros.

Me da mucha pena que por medio de espacios donde se puede escribir lo que se piensa aun cuando quizás las faltas de ortografía la poca gramática no tengan la elegancia ni elocuencia que el lector quiere, se rebase a toda marcha, insultando y provocando. A mi todo esto mas que enojarme, me preocupa que haya tanta gente afuera con clavos en vez de tornillos y con emociones arrinconadas que lo único que dejan saber es la falta de amor que quizás nunca conocieron o nunca tuvieron. 

Y lo vemos en todos lados, siempre hay repudio, venganza, acusación, mal intención que rompen las reglas de lo que es escribir. Yo desde aquí cada idea que se me venga a la cabeza la escribiré, y si a alguien no le gusta, la verdad es que es lo menos que me preocupa, ya que no lo hago para las personas que tienen problemas enraizados, si no para las personas como yo que necesitan a veces palabras y letras que nos den aliento para poder continuar en esta vida que la hemos logrado ver de colores. 

Si estamos en esta vida es para SUMAR no para RESTAR, y si no sumamos en nuestra propia vida, es evidente que trataremos de restar la vida de otras personas. 

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