Los 5 principios de una mamá moderna
Por: Guisela Rodríguez
No es fácil ser una madre moderna, que trabaja y educa a la vez. Es una tarea gigantesca, sin embargo, es posible lograrlo.
La sociedad se ha transformado y con ella los roles de cada uno de nosotros. Un claro ejemplo y muy frecuente son las mujeres que salen de casa para trabajar, ya sea con el fin de contribuir al ingreso familiar, por ejercicio profesional o por ambas razones.
Sin embargo, el ser una mujer trabajadora, no elimina el rol de madres, convirtiéndose entonces en un reto mayor que demanda a la mujer tiempo completo. La mayoría logra sobrellevar ambas funciones, pero los costos físicos y emocionales son altos.
Ya leíste: ¿Seré mala mamá si no le di lactancia materna a mi bebé?
Lo que no han notado es que no necesariamente se requiere estar todo el día con los hijos para atender sus necesidades. La solución es sencilla; sólo se requiere comprender y ejecutar las siguientes recomendaciones:
1. No eres una mala mamá por salir a trabajar
Al contrario, eres una mujer ejemplar y amorosa que hace lo necesario para proveer a sus hijos. Tú, antes que nadie, debes tener esto claro para transmitirlo a su vez a quienes te rodean, incluidos tus hijos.
2. Platica con tus hijos, ellos deben saber qué hace mamá cuando no está en casa
Si les compartes parte de tus actividades y conocen los beneficios económicos que esto trae a la familia, pero sobre todo, la importancia de tu satisfacción profesional, entenderán la importancia de tu trabajo, generando para ti respeto y no reproches.
3. Sé una mamá con límites
Aprende a poner límites a los hijos, de lo contrario en poco tiempo te sobrepasarán y al ser adultos tendrán muchos problemas para relacionarse con otras personas. Tenderán a convertirse en personas egoístas y desconsideradas. Recuerda ser fuerte, que una carita triste o retadora no te desvíe del cometido. Ser condescendiente les hará más daño que bien.
4. Destina tiempo de calidad mamá-hijo
Es un hecho que estar todo el día con ellos no es garantía de nada. Por ello, debes destinar tiempo de calidad con tus hijos. No basta con ver tele juntos o llevarlos a la escuela; se trata de tener una actividad especial que les permita interactuar, comunicarse y mantener fortalecido el lazo afectivo. Cuidado con esto, pues si lo prometes, debes cumplirlo. De lo contrario, solo perderás credibilidad.
5. Aparta un momento al día solo para mamá
Al estar absorbida en las diversas actividades del trabajo y de la casa, es posible que suelas abandonarte y dejarte al final de la lista de prioridades. Esto es contraproducente, también necesitas atenderte y consentirte para proyectar a los demás todo tu esplendor. Agenda tiempo para leer tu revista favorita, para la manicura, la mascarilla semanal, etc.
Te puede interesar: Prácticas debes de hacer sí o sí
Seguir estos pasos te ayudará a disfrutar lo que haces y funcionar mejor. De nada sirve estar en el trabajo lamentándose por los hijos, como tampoco lo es estar en casa pensando en el trabajo. Enfócate según corresponda y disfruta de cada momento. Ser madre es una gran bendición, pero también una fuerte responsabilidad. Vivirlo con satisfacción y en plenitud está en tus manos.
Por: Guisela Rodríguez
Psicopedagoga
Facebook: https://www.facebook.com/Lic-Guisela-Rodriguez-972675316123112/
Correo: rodriguez.mariaguisela@gmail.com